
Un caso de violencia de género ocurrido en Tunuyán se continúa investigando y llegará a juicio oral luego de que la Justicia mendocina confirmara la elevación de la causa contra Agustín Espósito Veliz, un joven peluquero de 21 años acusado de golpear brutalmente a su pareja, encerrarla y obligarla a tomar té de ruda para provocarle un aborto. La víctima, de 18 años, perdió el embarazo y estuvo al borde de la muerte.
La decisión fue adoptada este miércoles por la jueza Laura Guajardo, quien rechazó el pedido de la defensa y ratificó la acusación impulsada por la fiscal Eugenia Gómez. Espósito Veliz enfrentará cargos por tentativa de homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género (femicidio en grado de tentativa), privación ilegítima de la libertad agravada por violencia y aborto.
De ser hallado culpable, podría recibir una pena de entre 10 y 31 años de prisión.
La denuncia de la víctima
La investigación sostiene que todo ocurrió en la noche del 3 de junio pasado, en un domicilio ubicado en el barrio Margarita Graciela, en Tunuyán. Allí viven los padres de Agustín Espósito, quien también convivía con su novia de 18 años.
Según relató la víctima, en un momento le recriminó a su novio que dejara de fumar ya que ella estaba cursando un embarazo de 6 semanas. Comenzó una discusión donde el joven se tornó violento. La chica quiso llamar a su madre, pero Agustín Espósito le quitó el teléfono celular.
Según la acusación, la golpeó con puños y patadas en distintas partes del cuerpo. La acusación sostiene que el agresor preparó un té de ruda y la obligó a ingerirlo.
La agresión se prolongó hasta las 5:30 de la madrugada, cuando la joven comenzó a vomitar sangre y se descompensó. Espósito, junto a su madre, la llevó al Hospital Scaravelli, donde ingresó en grave estado y fue derivada a terapia intensiva. Permaneció allí 17 días internada y perdió el embarazo debido a una hemorragia interna.
La defensa de Esposito – Veliz
La familia Espósito Veliz también realizó su descargo en redes sociales y medios de comunicación, dando su versión de los hechos. Según su exposición, Agustín es inocente, actualmente transitan un expediente judicial, en el cual no hay pruebas y las declaraciones de la víctima no coinciden con lo expuesto en los medios. La familia del acusado, niega que el joven halla golpeado a su novia y que el golpe que sufre se da producto de un desmayo en el baño. Además, denuncian que la justicia no le ha brindado la posibilidad de declaración al acusado.

El abogado defensor de Espósito, Diego Rozzi, intentó que el proceso se realizara bajo una calificación más leve, sosteniendo que la vida de la víctima nunca estuvo en riesgo y que el aborto se produjo por una caída, no por los golpes. Sin embargo, esta hipótesis fue descartada en primera y segunda instancia.
La jueza Guajardo ratificó que existen suficientes pruebas médicas, testimoniales y periciales para sostener la acusación original. De esta forma, el expediente quedó en condiciones de ser debatido en juicio oral, cuya fecha se definirá en las próximas semanas.