La provincia de Mendoza registró un precedente histórico en materia de delitos digitales: por primera vez, la Justicia condenó a un hombre por grooming cometido a través de Roblox, uno de los videojuegos más populares entre niños y adolescentes. El acusado, Benjamín Elías Marín Mendoza, aceptó su responsabilidad en un juicio abreviado y recibió una pena de tres años de prisión en suspenso por distribuir imágenes de explotación sexual infantil. La sentencia fue dictada por el juez Marco Martinelli, del Juzgado Penal Colegiado N°1 de Tunuyán.
La investigación determinó que el hombre utilizó Roblox para iniciar contacto con una adolescente, simulando ser un usuario más. Tras ganarse su confianza, obtuvo su número de WhatsApp y comenzó a solicitarle fotografías íntimas. El intercambio se extendió durante varios meses, hasta que la madre de la víctima descubrió los mensajes y realizó la denuncia.
El fiscal D’Amore explicó que este expediente se unificó con otros dos:
Dos casos de víctimas menores de edad contactadas mediante plataformas digitales.
Un tercer expediente por distribución de material de abuso sexual infantil, detectado a partir de un reporte internacional emitido por la ONG NECMEC.
El acusado confesó los hechos, lo que permitió avanzar rápidamente en el proceso y concretar el acuerdo judicial.
Aunque la pena quedó en suspenso, la Justicia impuso estrictas obligaciones: fijar domicilio y notificar cualquier cambio, mantener prohibido el contacto con las víctimas y sus familias, realizar un tratamiento psicológico hasta recibir el alta profesional y donar cajas de leche como reparación simbólica.
El fiscal aclaró que la pena no es de cumplimiento efectivo debido a que el imputado no tenía antecedentes y la escala penal lo permite, aunque advirtió que el incumplimiento de alguna de las condiciones impuestas podría dejar sin efecto la suspensión de la condena.
