
La provincia de Mendoza recuperó parte de los $198.500.000 que un grupo de ciberdelincuentes sustrajo a la Asociación Cooperadora del Hospital Central y Programas Especiales mediante un hackeo. Ladrones virtuales habían logrado vaciar la cuenta de la entidad a fines del año pasado.
El hecho ocurrió el 5 de noviembre de 2024, cuando delincuentes brasileños vaciaron la cuenta bancaria de la entidad por un monto total de $198.500.000. Para lograrlo, utilizaron un troyano bancario conocido como Grandoreiro, un malware que se activó luego de que un empleado abriera un archivo PDF infectado enviado por correo electrónico.
La investigación a cargo de la fiscal Gabriela García Cobos y su equipo interceptaron y recuperaron $74.800.000 que estaban depositados en cuentas de Mercado Pago. El resto del botín de dinero electrónico fue a parar al universo de las criptomonedas y no ha sido hallado, aunque la pesquisa sigue.
El dinero del Hospital Central y la investigación
No hay imputados y la investigación de este tipo de delitos virtuales es altamente compleja ya que la ciberdelincuencia cuenta con herramientas que en pocos segundos captan el dinero y lo distribuyen en gran cantidad de cuentas y modalidades de inversión, como las monedas cripto.
Los casi $200 millones sustraídos a la Cooperadora del Hospital Central estaban destinados a la adquisición de insumos y tratamientos oncológicos y la recuperación, aunque parcial, es destacable, máxime cuando la ciberdelincuencia actúa con una ventaja superlativa respecto de las técnicas y herramientas investigativas en el mundo.
Desde el Ministerio Público Fiscal aseguran que en España, por ejemplo, apenas el 20% de los ciberdelitos son esclarecidos y muy rara vez se pueden recuperar los activos siniestrados.
Ya la detención de los responsables es casi utópico, coinciden especialistas del mundo